Las tendencias mundiales de negocios han reconocido al outsourcing como una herramienta estratégica capaz de permitir acceso a recursos de alto nivel, poner en control áreas difíciles de manejar, potenciar/acelerar el desarrollo de proyectos especiales.
Va a permitir además reducir costos, aumentar ingresos, ganar segmentos de mercado, mejorar los servicios a clientes, fomentar la innovación, alcanzar la excelencia y lograr economías de escala, en un ambiente de globalización, desregulación, privatización e innovación tecnológica. El negocio de outsourcing fue de aproximadamente $ 340 billones solo en USA en el año 2000 (Outsourcing Institute).